ANA MINGA

C

Esto es un abrupto 
donde solamente yerbajo crece
las paredes aplastan canciones
y las fotografías no gradúan el suicidio.

Ni el todo ni el poco se vinieron conmigo.

Con la neblina propia de los lentes
los ojos con su berrueco
las manos con sus planos de heridas
uno es un hilo con la nadería del espejo.

Acostarse despacio
para que el sueño no se vaya
pero aunque uno intente de todo
la sábana abraza un búho.

Los pájaros intentan traer noticias
pero sólo llega una pluma…

La sed enloquece
y el grifo cierne hastaluegos
que pasan a ser recuerdos
esos amigos y enemigos
que no proponen olvido
van subiendo desde el estómago

para convertirse en lágrimas de rutina.

¿Cárcel?
lo resumiría en minutología pausada
en la que el exilio me fuma
sabiendo que duele
porque aún quedan las ganas de volver
pues me expulsaron conmigo
y no con lo mío.

 

D

a mi padre

¿Sigues siendo puntual?
¿Sigues comiendo pan en las tardes?
¿Qué hiciste con tus pecas?
¿Hoy volviste a madrugar?
¿Te sigue doliendo el cuerpo?
¿Todavía te jode el salario?
¿Sigues muriendo cuando caminas?
¿Qué fue del perro?
¿Te gustó la limonada del almuerzo?
¿Todavía esperas la voz de tu hermano?
¿Cuántos subterráneos encuentras en ese libro?
¿Qué pasó con tu memoria?
¿Cambiaste de nombre?
¡Contesta por favor!
¿Qué haces aquí 
con ese foco en el cuello
alumbrando esta calle?